Otras notas
Hablemos de inversiones
Con estabilidad macroeconómica, crédito e incentivos fiscales, el país vecino continúa consolidándose entre ciudadanos argentinos como un destino para las inversiones inmobiliarias.
Paraguay sigue atrayendo la mirada de un inversor cada vez más global en busca de diversificar su portfolio. Es que esta pequeña nación de América Latina cuenta con un potencial enorme, donde los precios competitivos, los incentivos a la inversión inmobiliaria, una clase media en crecimiento y la tasa de rentabilidad, sumados a las condiciones macroeconómicas –con una inflación controlada y disciplina fiscal– y la seguridad jurídica, hacen de este país con poco más de 7,4 millones de habitantes un sitio de interés para el capital extranjero.
La construcción se convirtió en uno de los motores económicos del país y en los últimos dos años creció a un promedio anual del 12%, según la Cámara Paraguaya de Desarrolladores Inmobiliarios (Capadei). En lo que va de 2022, de acuerdo a datos de esta entidad, las inversiones en el rubro superaron los US$ 350 millones y solo en el primer semestre creció 25% la aprobación de créditos.
La rentabilidad por alquiler se calcula entre el 4% y el 7% y los niveles de retorno de inversión son superiores a los de otros países de la región. Durante la pandemia, la construcción fue uno de los sectores que pudo continuar con su actividad y, por esta razón, no registró caídas.
Tal como describen desde la Capedei en un reciente artículo publicado en el diario ABC, hoy existen más de 50 grandes proyectos en Asunción y casi 100 si se suman los ubicados en Gran Asunción. De ellos, el 95% está destinado al sector habitacional, mientras que el resto se reparte entre edificios corporativos y comerciales. Una parte de las inversiones se dirigió a proyectos ubicados a lo largo de las avenidas Aviadores del Chaco y Santa Teresa, que se encuentran en el nuevo eje corporativo de la capital, con los icónicos World Trade Center y el Blue Tower.
Según datos del mercado, se cree que esta tendencia podría mantenerse, dado que Paraguay aún cuenta con déficit habitacional, estimado en cerca de 1 millón de viviendas, y la demanda de alquileres en Asunción es alta.
Alquileres de viviendas
En la capital paraguaya, el precio promedio del metro cuadrado de una propiedad promedia los US$ 1300 y el de alquiler oscila entre los US$ 400 y US$ 900 al mes. No obstante, un 15% de los desarrollos inmobiliarios del mercado tienen un precio de alquiler mensual de US$ 3.000 o más. Según estimaciones del mercado, el tiempo promedio que se tarda en alquilar una propiedad es de 27 días.
Pero el alquiler tradicional no es la única alternativa que se baraja en la capital paraguaya a la hora de buscar rentabilidad: una pasada por sitios de alquiler temporario como Airbnb o Booking da cuenta de que la noche en un departamento de dos ambientes o loft en Asunción se paga entre US$ 30 y US$ 65, sin incluir impuestos.
La capital del país es un imán de atracción para viajeros de negocios, con sitios como Villa Morra –una zona residencial y comercial que se convirtió en uno de los barrios más aspiracionales de la ciudad–, Las Carmelitas –conocido también como Las Lomas, que destaca por su movimiento, cadenas hoteleras, centros comerciales y cercanía al nuevo eje corporativo– y Mburucuyá –donde tiene su sede la Facultad de Derecho de la Universidad Nacional de Asunción, así como el Club Universitario de Rugby de Asunción– en pleno auge.
A saber: Asunción está organizada en seis distritos (Santísima Trinidad, La Encarnación, La Catedral, Santa María de la Asunción, San Roque y La Recoleta) divididos en 68 barrios. Los más poblados son San Pablo, Roberto L. Petit y Obrero.
De acuerdo a un informe de Macrolab, entre las zonas más valoradas de Asunción se encuentran las avenidas Av. Eusebio Ayala/ Av. Rca Argentina a Médicos del Chaco, Av. Mcal. López entre Legión Civil Extranjera y Rca. Argentina, Av. Rca. Argentina/ Av. Eusebio Ayala a Av. Fernando de la Mora.
Pero, más allá de la capital paraguaya, también hay perspectivas favorables para otras zonas, como Nueva Asunción, donde se avizora un polo de crecimiento inmobiliario importante, y Concepción.
En Paraguay, el sector inmobiliario fue uno de los más dinámicos en los últimos tiempos. Incluso, en plena pandemia, recibió inversiones por parte de capitales argentinos, chilenos y brasileños, dicen desde la Capadei. De hecho, entre 2019 y 2020, se triplicaron las residencias otorgadas y en 2021 las consultas para comprar propiedades se dispararon. Desde la cámara mantienen el optimismo a mediano y largo plazo, dado que sostienen que el sector inmobiliario es un refugio de inversión y estiman que el sector seguirá creciendo.
Si quieres saber más sobre los proyectos de Vitrium Capital en Asunción y evaluar oportunidades de inversión, te invito a visitar nuestra web www.vitriumcapital.com.