Las construcciones de mayor altura que ofrece la región se transformaron en un ícono en cada una de las ciudades donde están emplazados y reflejan lo que tiene para ofrecer el real estate. Qué características tienen y cuándo fueron construidos
Icónicos. Emplazados en lugares exclusivos y dueños de vistas únicas. Referencias obligadas del paisaje urbano por su importancia y sus características arquitectónicas. Los edificios más altos de América del Sur se destacan en las ciudades en las que están ubicados y son un reflejo de lo que el real estate tiene para ofrecer en la región.
Según los datos consignados por el sitio Skyscraper, que recopila información sobre las construcciones de mayor altura en todo el mundo, en América del Sur el ranking de los edificios más altos lo encabeza en este momento la Gran Torre Santiago, rebautizada Gran Torre Costanera en 2022 y ubicada en la capital de Chile. Con una altura de 300 metros y 64 pisos, el edificio de oficinas diseñado por el célebre arquitecto argentino recientemente fallecido César Pelli es también uno de los más altos de todo el hemisferio sur.
Inaugurado en 2014, el edificio forma parte de un complejo denominado Costanera Center, que incluye el shopping más grande de Santiago, hoteles de cinco y cuatro estrellas y otra torre de oficinas. Posee un mirador famoso en los pisos 61 y 62, a 253 y 261 metros de altura, que permite observar en 360 grados todo el paisaje de la ciudad hasta una distancia de 50 kilómetros de largo, según las condiciones climáticas. Tanto el mirador como el complejo en sí se convirtieron en un punto turístico de referencia para los visitantes de la ciudad desde que fueron inaugurados. La imagen de la torre de oficinas en el corazón de su centro financiero es considerada para muchos un símbolo del crecimiento económico de Chile en las últimas décadas.
Detrás de la obra de Pelli en Chile se ubica en el ranking de altura la torre One Tower, emplazada en el balneario Camboriú, Brasil. Se trata de una construcción residencial muy reciente, terminada hace pocos meses, en diciembre de 2022, que alcanzó los 290 metros de altura, muy cerca de las dimensiones de la Gran Torre Costanera chilena. El One Tower se convirtió en el edificio más alto y lujoso de Brasil, con 77 pisos, frente a la playa. Tiene a la venta departamentos exclusivos de 200 metros cuadrados que trepan a los US$10.000 el m2.
El de Camboriú es un caso que llama la atención porque hasta la inauguración de la One Tower también poseía el segundo edificio más alto de la región, las Yachthouse Residence Club Towers, dos torres gemelas residenciales de 281 metros y 81 pisos, que bajaron ahora al tercer lugar en el ranking. Ambas construcciones concluidas en 2020 llevan la marca de diseño del prestigioso estudio italiano Pininfarina (una práctica que empezaron a adoptar proyectos de alta gama que buscan diferenciarse). Camboriú, así, se transformó en sede de los dos emprendimientos más altos de Brasil, por encima incluso que construcciones de ciudades como San Pablo o Río de Janeiro.
En el cuarto lugar aparece un edificio argentino, la Alvear Tower. Con 239 metros de altura, está ubicada en Puerto Madero, el barrio más nuevo y cotizado de Buenos Aires. Su construcción llevó siete años (se inauguró en 2019) y se transformó en el edificio más caro de la ciudad, con un precio del metro cuadrado en torno a los US$10.000. Tiene 54 pisos y 174 departamentos de hasta 500 metros cuadrados, junto con un amplio despliegue de amenities, como es una regla en emprendimientos de lujo. La torre ofrece vistas únicas de toda la ciudad y el Río de la Plata en 360 grados.
El quinto edificio más alto de América del Sur vuelve la mirada a Camboriú: se trata de la Infinity Coast Tower, de 235 metros, que fue inaugurado en 2019. Tiene 66 pisos y un amplio abanico de amenities de lujo, en la misma línea que las otras torres mencionadas en el mismo balneario. Al momento de su apertura, y durante casi un año, exhibió el título del edificio residencial más alto de todo Brasil, hasta la finalización de la construcción de las Yatchhouse Residence Club Towers en 2020. Como dato interesante que refleja el desafío de levantar proyectos en altura en la zona, al borde de la costa, el Infinity Coast tiene cimientos de una profundidad de 15 pisos.
Los cinco edificios mencionados no solo se destacan por sus características arquitectónicas y por el factor simbólico de lo que encarnaron al momento de su inauguración: también marcaron récords en cuanto al uso de materiales y enfrentaron una delicada complejidad al momento de su construcción en función de su diseño. Pero hoy se lucen en el horizonte de cada una de las ciudades en las que están emplazados.